¿Qué es una Resonancia Magnética Abierta?
Al igual que la resonancia magnética cerrada, la resonancia magnética abierta es una prueba diagnóstica por imagen, no invasiva y sin efectos nocivos para el paciente. Emplea un campo magnético externo combinado con pulsos de radiofrecuencia, que permiten obtener cientos de cortes de una determinada región anatómica.
Se utiliza para examinar tejidos, órganos y el sistema musculoesquelético, permitiendo diagnosticar una amplia variedad de patologías.
Diferencia entre resonancia abierta y cerrada
La diferencia fundamental entre la resonancia abierta y cerrada se encuentra en la posición que adquiere el paciente durante la prueba. En la resonancia cerrada es introducido en un tubo dónde se concentra el campo magnético. Sin embargo, en la resonancia abierta se sitúa entre dos platos que cuentan con aberturas laterales, en este caso la concentración del campo magnético es peor, proporcionando imágenes de menor calidad.
Este tipo de resonancia está especialmente recomendada para pacientes que sufran claustrofobia y para pacientes con obesidad, ya que cuenta con un diámetro abdominal más amplio que la cerrada.
¿Cómo se realiza la prueba?
En los dos casos, para la realización de la prueba el paciente será asesorado por el personal sanitario de nuestro centro. En primer lugar, se le indicará dónde depositar sus objetos personales, y en la sala de resonancia la postura que debe adquirir durante la prueba. La duración de la misma será de entre 25 y 30 minutos.
Preparación previa
En caso de no requerir contraste, la resonancia magnética no precisa de una preparación previa. Si el paciente necesita un relajante, deberá informar al especialista con el fin de que lo prescriba.